Te intenté coger,
soltándome a mí.
Te intenté dar calor,
sin pensar en el frío que tenía.
Te intenté proteger,
desprotegiéndome yo.
Te intenté hablar,
olvidándome de que mis versos
eran los únicos que podían hacerlo.
Yo te intenté en pretérito perfecto simple,
pero un día
te convertiste en mi pasado.